Información procesable sobre amenazas emergentes para respaldar estrategias de seguridad proactivas.
CypSec define la inteligencia como el recurso decisivo de la defensa cibernética moderna. Nuestro marco de inteligencia de amenazas funciona como un ecosistema de ciclo cerrado, donde la información se recopila, valida, enriquece y despliega con inmediatez operativa. La inteligencia nunca se trata como un informe estático, sino como un recurso accionable que representa la base de la soberanía cibernética.
Las fuentes incluyen inteligencia de código abierto, mecanismos de recopilación propietarios, infraestructura de engaño y telemetría de incidentes integrada. Los analistas de inteligencia sintetizan estos datos en manuales de adversarios, mapas de evolución de herramientas e indicadores de alerta temprana. Los resultados se integran directamente en las cadenas defensivas: cadenas de detección, bloqueo automático y evaluaciones estratégicas de riesgo.
A diferencia de los feeds de inteligencia controlados por terceros o poco transparentes, el modelo de CypSec prioriza la soberanía. Los socios mantienen plena propiedad del flujo de inteligencia, garantizando independencia de proveedores externos. La inteligencia se contextualiza para dominios operativos específicos, incluyendo infraestructura crítica, defensa o gobernanza civil. De esta manera, la inteligencia de amenazas se convierte en una capacidad completamente propiedad del cliente.
Agregue inteligencia de OSINT, entornos de engaño y telemetría en tiempo real.
Filtre ruido y falsos positivos, asegurando precisión y fiabilidad operativa.
Contextualice los indicadores con objetivos, campañas y patrones de tácticas de adversarios.
Entregue inteligencia directamente en las cadenas de detección y flujos de trabajo de los socios.
Los socios poseen y controlan toda la inteligencia, preservando soberanía y autonomía.
La investigación propia de inteligencia de amenazas de CypSec produce resultados estructurados que enriquecen las pipelines de detección y guían la toma de decisiones operativas. Los entregables se centran en la recopilación automática de datos, el enriquecimiento con metadatos contextuales y formatos de compartición que mantienen la soberanía de los socios. Los resultados garantizan relevancia, puntualidad y aplicabilidad a infraestructuras diversas, transformando señales fragmentadas en flujos de conocimiento coherentes que mejoran activamente las posturas defensivas.
Automatiza la recopilación y filtrado de inteligencia de amenazas pública.
Agrega contexto a los indicadores de compromiso en bruto correlacionándolos con telemetría y datos de engaño.
Briefings de inteligencia oportunos con indicadores accionables.
Mecanismo seguro para que los socios compartan y utilicen inteligencia sin perder el control.
Tasa de precisión
Retraso en la distribución de inteligencia
Cobertura de integración con SIEMs
Exchanges de socios establecidos
La investigación de CypSec desarrolla metodologías para la recopilación automatizada, enriquecimiento y contextualización de indicadores de amenaza. El trabajo se centra en sintetizar OSINT, telemetría y salidas de entornos de engaño en inteligencia estructurada que informe los pipelines de detección y la toma de decisiones operativas. La precisión y la oportunidad son criterios clave de rendimiento.
CypSec también integra la inteligencia en operaciones defensivas. Los indicadores se vinculan a la lógica de detección, paneles de riesgo y estrategias de contención proactiva. Se hace hincapié en mantener la soberanía de los socios, asegurando que los feeds de inteligencia permanezcan bajo control operativo, permitiendo al mismo tiempo una mitigación rápida y precisa de las amenazas emergentes.
CypSec opera la inteligencia como un ecosistema cerrado, donde los datos se recopilan, enriquecen y despliegan en tiempo real. Las fuentes incluyen OSINT, mecanismos de recopilación propios, entornos de engaño y telemetría de incidentes. Los analistas sintetizan esto en manuales del adversario, indicadores de alerta temprana y acciones de defensa automatizadas. La inteligencia está completamente controlada por los socios, evitando la dependencia de fuentes externas, e integrada en pipelines internos de detección y respuesta, transformando la inteligencia de un servicio consumible en una capacidad poseída y operada por la organización.
Los resultados de la inteligencia se convierten directamente en medidas operativas como alertas automatizadas, reglas de detección actualizadas y directrices estratégicas. Los socios pueden actuar de inmediato sin retrasos de interpretación, integrando los conocimientos en la respuesta a incidentes, las decisiones de ingeniería y la planificación de la gobernanza. Esta integración operativa garantiza que la inteligencia refuerce directamente la soberanía y la resiliencia.
La inteligencia se valida de forma continua mediante telemetría en tiempo real, entornos de engaño y corroboración entre fuentes. Los analistas evalúan la credibilidad, contextualizan la información y eliminan falsos positivos, garantizando que los socios actúen únicamente con base en conocimientos verificados y aplicables. Este proceso riguroso preserva la confianza en la inteligencia como fundamento para la toma de decisiones.
La inteligencia se comparte a través de canales seguros y controlados que aplican políticas de acceso, cifrado y anonimización cuando es necesario. Los socios conservan la propiedad de sus datos al tiempo que se benefician de perspectivas colectivas, lo que permite colaborar en tendencias de amenazas, tácticas e indicadores sin exponer información operativa sensible ni generar dependencia de proveedores externos.